Breve introducción a la familia y la Condición Humana.





 La condición humana en su proceso evolutivo (desde los primero primates que se desarrollaron hace unos 70 millones de años durante el Paleoceno), junto con nuestra capacidad de discernir, nuestra capacidad de entender y tratar de comprender nuestra “existencia”, de la mano y sin separarse nunca fue creciendo un aspecto fundamental que sentaría buena parte de la forma en la que hoy nos relacionamos con los de nuestra especie, nuestra necesidad de agruparnos en sociedad.

Hablando un poco más de prehistoria por allá hace unos 299 millones de años, durante la era Paleozoica, específicamente en el pérmico medio comenzaron a tener auge unas criaturas que actualmente conocemos como “proto-mamiferos”, si, los mismos que millones de años después desencadenaría nuestra línea evolutiva. Con su aparición, y con una buena jugadita de dados del arquitecto de nuestro universo hubo un acontecimiento de suma importancia, el CORTEX CEREBRAL, comenzó a desarrollarse ampliamente, a crecer; pero dicho crecimiento no representaba solo un aumento de tamaño vulgar, en esa red neuronal, tuvo cabida las primeras emociones definidas como las conocemos hoy, y con las proto emociones, surgió la empatía. Si bien lejos de relacionarse como los mamíferos actuales, o como nosotros los humanos, aquellos animales germinaron la semilla de la relación afectiva humana fundamental; en un conjunto de parejas, macho y hembra, cuando concebían crías estos se quedaban juntos, cuidaban a sus crías en las primeras etapas de su crecimiento, de su llegada al mundo; y si bien, es un poco complicado verlo de esta manera, pero indudablemente, nace el amor…

Volviendo a nuestros queridos humanos, muchos autores citan que la familia es la base de toda sociedad, sin embargo no hace falta ser un experto en neurología o en conductualidad humana para darse cuenta de esto, ¿o no?

En todo tiempo, la familia ha sido per se el lugar normal y originario para la formación de los niños y jóvenes en el desarrollo de sus capacidades y valores.

Pero ya va, siempre hablamos de valores como cosas bonitas, cosas bien encaminadas, y a lo otro denominamos conductas inadecuadas o anti-valores (los anti valores sencillamente SON valores), y una multitud pronombres porque nos gusta muchas veces negar una realidad clara, o ir doblando pertinentemente la realidad con nuestras manos; no estamos en el kínder o el jardín, entendamos que los valores son Todos los atributos Psicosomáticos de un individuo en cuestión.

Más específicamente: El valor es una cualidad de un sujeto o un objeto. Los valores son agregados a las características físicas o psicológicas, tangibles del objeto; es decir, son atribuidos al objeto por un individuo o un grupo social, modificando a partir de esa de lo cual es la atribución su comportamiento y actitudes hacia el objeto en cuestión. El valor es una cualidad que confiere a las cosas comunes, hechos o personas una estimación, ya sea positiva o negativa.

 

Entonces ya ven que la familia es la cuna de todo, ¿no?

 

A lo largo de este blog iremos “desmembrando” la estructura familiar, y daremos a notar la relación directa con la salud del individuo (como unidad) y del individuo como ser social.

Los mamíferos proceden de los reptiles, que evolucionaron para aprovechar nichos ecológicos a los que antes no les era posible adaptarse.




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